Demasiado tengo, demasiado poco

Demasiado tengo, demasiado poco.

Me duele tan solo pensarlo, me duele porque más que pensarlo es vivirlo.
Me duele porque ya no sé en lo que creo, ya no sé a qué he llegado.

No quiero perder la fe, por más que mil veces la he perdido.
No quiero tener que perderte, por más que tal vez
hace tiempo te he perdido.

Quizas necesito perderme y olvidar.
Olvidar y restaurarme, evitar que me desarme.

Ya que el solo pensar en la consecuencia de mis palabras, o tus palabras, o las palabras...
me estremece.
Tus labios ya no sabrán lo mismo cada vez que te bese.

Tal vez nunca vuelvo a besarte y esto es puro chamullo
Me duele tan solo pensarlo...
¿hacia dónde huyo?


Se me agota el tiempo, se me agota todo.
Demasiado tengo, demasiado poco.


(11/11/10)