23 febrero 2013

She's so heavy

Las cortinas estaban abiertas y afuera la noche estaba siendo custodiada por una inmensa luna llena que otorgaba la única luz en la habitación.

Cerró la puerta al pasar detrás de ella y no supo que más hacer. Las manos le sudaban. Su pecho reventaba.

«Te deseo... Te deseo tanto...» Sus ojos imploraban por él.

Ella se recostó sobre la cama. Se soltó el cabello y lo miró fijamente. Pareció una eternidad hasta que pestañeó. No sabía cuanto tiempo más él iba a estar allí parado.

«Te deseo... Te deseo demasiado...»

Como si todo le diese igual, se sacó el suéter lentamente. Su falda también desapareció en segundos que parecieron siglos.

«Me está volviendo loco»

Parecía que el mundo comenzaba y se terminaba en ella. Sonreía, como si todo fuera perfecto. Ella lo era. 

«Te deseo... Te deseo enfermamente...»

Se quedó exhibiéndose no más que con el sujetador... hasta que se lo soltó y se cubrió con los brazos. Las bragas seguieron el mismo camino. El brillo de la luz lunar evidenció la malicia en su mirada, la picardía en su sonrisa; una tensión inevitable.


No lo soportó más. En un impulso inaudito, se tumbó sobre ella y empezó a consumir su deseo.

Ella era demasiado.



Trujillo
(Algún día de febrero)

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Y bailarás sobre mi tumba

Fui concebido entre libros y cadáveres y un etetoscopio fue mi primer walkman.

Siendo el único No Médico
no tuve más
reparo que
dedicarme a escribir...